JAPÓN NO ENVIARÁ REPRESENTACIÓN DIPLOMÁTICA A BEIJING 2022

  • El anuncio llega después de que varios países anunciaran un boicot a China por vulnerar los derechos de la minoría uigur en la región de Xinjiang

Ciudad de México.- ¿Se unen al boicot? Japón no enviará representación diplomática a los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022, según dio a conocer el gobierno viernes, al tiempo que se instó al respeto de los derechos humanos y la libertad en China, tras el veto diplomático anunciado por Estados Unidos a la justa deportiva.

El vocero de gobierno de Japón, Hirozaku Matsuno, evitó hablar sobre el boicot al evento, pero señaló que Japón «no tiene planes de enviar responsables gubernamentales» a Beijing 2022.

Según Matsuno, «Japón estima que es importante que los valores comunes compartidos por la comunidad internacional, como la libertad, los derechos humanos y el Estado de derecho, sean igualmente respetados en China».

El vocero dijo que la presidenta del comité organizador de los pasados Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Seiko Hashimoto, y el dirigente del Comité Olímpico de Japón, Yasuhiro Yamashita, sí viajarán a la capital de China para el evento que se realizará del 4 al 20 de febrero del próximo año.

Hashimoto irá a Beijing «para expresar gratitud y respetar a los atletas y a otras personas que han apoyado los Juegos de Tokio» organizados este verano, con un año de retraso por la pandemia, dijo el vocero gubernamental.

Japón tomó esta decisión tras un «examen profundo» de la situación y llega después de que varios países como Estados Unidos, Reino Unido, Australia y Canadá anunciaran a principios de este mes un boicot diplomático a los Juegos de Beijing 2022, acusando a China de vulnerar los derechos de la minoría musulmana uigur en la región de Xinjiang, en el noroeste.

Esta iniciativa no afectará la participación de los deportistas en los Juegos Olímpicos de febrero, pero provocó un profundo enfado en China, cuyas autoridades aseguraron que estos cuatro países «pagarán el precio» de este boicot, sin precisar qué represalias tomará.

Horas después del anuncio del gobierno japonés, el vocero del ministerio chino de Relaciones Internacionales, Zhao Lijian, se felicitó por la visita del «comité olímpico japonés y de otros responsables, así como de los deportistas japoneses», recordando que China «ha solicitado insistentemente a Japón que cumpla su promesa de apoyarse mutuamente en la organización de los Juegos Olímpicos y de no politizar el deporte».

Delicada posición diplomática de Japón en Beijing 2022
Japón, que organizó los últimos Juegos Olímpicos de Verano, se encuentra en un difícil equilibrio por las agrias tensiones entre China y Estados Unidos, sus dos principales socios comerciales.

Corea del Sur, otro cercano aliado de Estados Unidos en Asia, dijo a inicios de esta semana que no boicotearía diplomáticamente Beijing 2022, invocando la necesidad de cooperar con China.

China ha recibido el apoyo de Rusia, que ha acusado a las potencias occidentales de querer politizar los Juegos. El presidente Vladímir Putin anunció recientemente que acudirá él mismo en persona a Beijing.

Por su lado, el Comité Olímpico Internacional ha invocado su «neutralidad» sobre esta cuestión, rechazando comentar «decisiones puramente políticas» y celebrando que el boicot no afecte a la participación de los deportistas.

Según organizaciones humanitarias, al menos un millón de uigures y de otras minorías de religión musulmana están encarcelados en campos en Xinjiang y acusan a China de esterilizar a las mujeres y de imponer trabajos forzosos.

Estados Unidos denuncia un «genocidio», mientras que Beijing asegura que los campos son en realidad «centros de formación profesional» para luchar contra la radicalización.

China denuncia regularmente que Washington utiliza esta cuestión de los derechos humanos para frenar su desarrollo económico y contestar el creciente protagonismo del gigante asiático en los negocios internacionales.

El gobierno chino también señala al G7 y a la Unión Europea, que el lunes mostraron su «viva preocupación» tras la «erosión» de la democracia constatada en Hong Kong el pasado fin de semana durante las elecciones legislativas locales.

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