Ciudad de México.- La Alianza por la Salud Alimentaria (ASA) y la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) demandaron a la Federación Mexicana de Futbol y a la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA), así como a la empresa refresquera Coca Cola, no utilizar a niños para la publicidad de productos, y más cuando se trata de los que están dañando la salud de la población infantil, de los cuales por diversos medios se trata de reducir su consumo.
En conferencia de prensa, Alejandro Calvillo, presidente de la Alianza, señaló que antes de terminar esta semana se enviarán las cartas al presidente de la FMF, Decio de María y al de FIFA, Gianni Infantino, exigiendo explicación para saber quién es el responsable de que los jugadores de futbol de México y Estados Unidos en el Estado Azteca, salieran acompañados de niños de entre 8 a 10 años, que “de manera inusual”, llevaban grades logos de la marca Coca Cola.
Dijo que el pasado 11 de junio, en el encuentro de eliminatoria para la copa mundial en Rusia 2018, entre ambas selecciones, se llevó a cabo el acto protocolario, en el que se cantan los himnos y se presentan las banderas de cada nación, teniendo frente a cada uno de los jugadores, a los menores portando el logo de la refresquera.
“Estos acompañamientos infantiles nunca antes habían salido al campo de futbol en un partido internacional con este tipo de publicidad y lo están haciendo en un país que tiene los mayores consumos de bebidas azucaradas en el mundo y que ha implementado políticas públicas para reducirlo. El año pasado, la Secretaría de Salud declaró emergencia epidemiológica por obesidad y diabetes. Las bebidas azucaradas contribuyen más a que se desarrollen estas enfermedades”, señaló..
Calvillo agregó que la empresa del producto publicitado, Coca Cola, se ha comprometido ante la Organización Mundial de la Salud y organismos de salud nacionales a no realizar publicidad dirigida a menores de doce años.
Por su parte, Sandra Mejía, de la Redim, añadió que «existe una correlación de las empresas que producen bebidas azucaradas en la violación de los derechos humanos, y el Estado mexicano, que es el responsable de regular a la industria de bebidas y alimentos para garantizar el derecho a la salud. El Estado permanece omiso, no vela por salud de los infantes y sí por los intereses de las grandes empresas refresqueras y de comida chatarra».
