LOS HECHOS/ PANISTAS VS. CAVECISTAS

POR José Inés Figueroa Vitela

CANTUROSAS… ¡CULPABLE!

Las expectativas de la opinión pública, de los partidos y actores políticos estan puestas respecto de los saldos que dejaron las precampañas, en el posicionamiento de cada una de las propuestas.

La conclusión es que los tres aspirantes en pugna, crecieron en la identificación y aprecio popular.

Mediciones profesionales espejo, levantadas en Tamaulipas al término de la jornada proselitista, coincidieron en aquella conclusión, más o menos en los mismos niveles.

No fue una encuesta traiciónal, de las que han dominado el espectro estos tiempos, que para el terruño reduce el universo de referencia a mil consultados, por la vía relefónica.

Sin perder las primicias de ser estratificada, probabilistica, representativa y todas esas condiciones de las mediciones profesionales, está cubrió un universo de 10 mil ciudadanos en entrevistas personales, cara a cara.

Ello eleva su nivel de acertividad.

Los resultados principales de tales trabajos establecen que AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, el abanderado de la coalición MORENA-PR-PVEM, creció en la intención del voto del 43 al 52 por ciento, mientras el del frente prianperredista, CESAR VERASTEGI pasó del 12 al 17 por ciento.

Entre los reactivos del sondeo, sobresalen otros datos interesantes.

Entre ellos, el que sea el 27 por ciento de los panistas declarados, quienes se pronuncien por un cambio en el gobierno, identificando al doctor AMÉRICO VILLARREAL como el individuo que puede personificar tal aspiración.

Se pensaría que sería a la inversa, pero al hacerle la misma pregunta a los priístas, en su caso son solo el 12 por ciento, quienes públicamente se declararon por el cambio a favor de la coalición Junros Hacemos Historia.

Otros detalles, como los negativos y positivos que los ciudadanos tamaulipecos identifican entre los aspirantes, las expectativas de crecimiento, sus topes, la percepción del saldo electoral, complementan la medición de marras sobre lo que ya habrá oportunidad para abundar.

En el universo de adhesiones, que andan buscando la puerta de entrada al movimiento morenista, exdiputados, exalcaldes y ex funcionarios de los más variados niveles y partidos, por supuesto más del PRI y del PAN, andan buscando la oportunidad de hacerle saber en persona sus preferencias al candidato.

Otros solamente andan chambeando por la causa, en constancia de su vocación e intención en el actual proceso.

El reclutamiento de sus perseguidos políticos, para ponerlos al servicio de la causa, es una, entre tantas “estrategias” desplegadas desde el palacio estatal, que no les ha funcionado.

Ni GUSTAVO TORRES en Tampico, ni LETICIA SALAZAR en Matamoros, ni EVERARDO VILLARREAL en Reynosa, ni LUIS ANTONIO MEDINA JASO en Soto la Marina y tampoco OSCAR ALMARAZ en Victoria, han abonado para remontar el mal humor social en contra del PAN y su mal gobierno.

Es tal la desesperación en el cuarto de guerra gubernamental, que ahora tratan de “empapelar” a toda costa, al alcalde capitalino LALO GATTÁS, buscando por las mismas vías del amago, agenciarse sus buenos oficios políticos entre la ciudadanía.

En otro juego de palabras e invasión de facultades, ayer volvieron a usar al falso ente autónomo llamado Fiscalía Anticorrupción, la Fiscalía General y la Unidad de Inteligencia Financiera del Estado, para amenazar con encarcelar al alcalde capitalino.

Le sacan presuntas operaciones como particular, antes de asumir el cargo, para acusarlo de cohecho, el mismo delito que le imputaron al exgobernador EUGENIO HERNÁNDEZ para detenerlo y que la justicia federal desestimó, exhonerándolo.

Pero esa es la de ellos; no tienen más argumento que el uso de las instituciones de procuración y administración de la justicia, para obligar a “la gente” a estar con ellos, aunque desde hace rato no les ande funcionando.

Cosa muy distinta es el congelamiento de cuentas de “empresas fachada”, ejecutado por la Unidad de Inteligencia Financiera federal, sospechosas de ser instrumento de familiares directos del YSQ  tamaulipeco, para la sustracción del presupuesto tamaulipeco, relacionadas con grupos delincuenciales.

Manito MAYELO y la chulada de “primitos en fuga” que se cargan, aparecen en autos.

Lo que no descubre al agua, lo descubre el tiempo.

Hay quienes ya se apuran a juzgar y sentenciar a la alcaldesa de Nuevo Laredo CARMEN LILIA CANTUROSAS, declarándola ¡culpable!

Lo hacen respecto de la fotografía que con tanta profusión e intención se hizo propalar, donde aparece el titular del ejecutivo local, FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA con el Presidente de la República ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

Resulta que como todo mundo sospechó, el encuentro fue fortuito, cuasi furtivo, inesperado y sacado de contexto.

No hubo intercambios de proyectos, camaraderías o acuerdos, menos perdones, exhoneraxiones o reconciliaciones, como los voceros habrían filtrado en sus espacios de a tanto la línea.

Con el pseudónimo de Loret, mandaron decir que la mentada foto, era signo de que las acusaciones contra el Gobernador eran falsas, “o que ya hubo un acuerdo para tapar el expediente”.

Nada de eso; CABEZA se hizo el aparecido en la gira presidencial, a la que no fue invitado por Presidencia y en el momento que pudo toparse con el Presidente, le dio su celular a la alcaldesa anfitriona, pidiéndole que le tomara la foto al lado de AMLO, para que no se safara.

¿Tu también CARMEN LILIA?, se preguntaron los enterados, pero pronto se aclaró que se trató de un evento sorpresa, no programado y menos deseado.

Fue un instante y anda vete.

En la sesión plenaria del congreso local de ayer, hubo jaleo multicolor, con la presencia de integrantes de la comunidad LGTBI+ y pastores de diferentes cultos, pronunciándose a favor y en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo.

La iniciativa presentada por la diputada morenista NANCY MARTÍNEZ libró un primer debate, en la dispensa de trámite que fue rechazada por mayoría; los tantos artículos del Código Civil puestos a refora mercieron su turno a comisiones.

Hubo más, por supuesto, pero hoy el espacio de agotó.

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