Padres de familia que intenten corregir la orientación sexual de sus hijos podrían alcanzar cárcel

Por José Gregorio Aguilar

El presidente del Frente Nacional por la Familia (FNXF) Rodrigo Iván Cortés denunció que ya el Senado de la República  aprobó la  iniciativa de la senadora y secretaria del CEN de Morena Citlalli Hernández, que buscará imponer una sanción de 2 a 6 años de cárcel a quienes no apoyen la ideología de género, por lo que ahora está en las manos de la Cámara de Diputados su eventual aprobación.

Aseguró que es un asunto  de suma urgencia ya que si se realiza, se imparte, aplica, obliga o financia cualquier tipo de tratamiento, terapia, servicio o práctica que obstaculice, restrinja , impida, menoscabe , anule o suprima la orientación sexual, identidad o expresión de género de una persona, pueden imponer cárcel y una multa.

“Prohibirles el derecho a la salud a las personas que tiene disforia de género, castigar a cualquier persona que ayude a estas personas y un tercer elemento, en la última parte de esta iniciativa se busca mandar a la cárcel a las personas que ejerciendo su libertad de expresión discrepen de estas barbaridades y puedan decir, oigan esto no está bien”.

Dicha iniciativa afecta a médicos, psicólogos, ministros de culto, padres de familia y cualquier ciudadano ya que se está restringiendo la libertad de expresión religiosa y de educación de padres hacia sus hijos.

El proyecto contempla que en caso de que sea el padre, madre o tutor de la víctima los que incurran en las conductas sancionadas, se les aplicarán las sanciones de amonestación o apercibimiento a consideración del juez.

“Discrepar de estas barbaridades sería un delito con una pena corporal de 2 a 6 años que con ciertos agravantes llevaría a la cárcel por 28 años a un padre de familia que quiera ayudar a un hijo con ese tipo de disforia, a un ministro de culto, a un catedrático, a cualquier persona; esto es una locura”.

Como se sabe, actualmente la Cámara de Diputados continúa el análisis de la iniciativa que pretende prohibir las terapias relacionadas con la orientación sexual. La pregunta que el FNXF hace es, si  un homosexual desea cambiar de estilo de vida, por qué no podría hacerlo?

Como ya se dijo, la iniciativa además implicaría penalizaciones para padres de familia que apoyen a sus hijos para tomar este tipo de terapias.

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