AGENDA FRONTERIZA/ POR HUMBERTO GUTIÉRREZ

COMO EL AVE FENIX

Ha llegado el tiempo de hacer un espacio en mi camino para vivir la Navidad, un año más.

La Vida y el Tiempo son los mejores maestros.La Vida… Nos enseña a valorar el tiempo. El Tiempo… nos enseña a valorar la vida.
Gracias por tanto y tanto.

La gratitud es parte esencial de mi persona.

El miércoles 18 vio la primera luz de este mundo mi quinto nieto, sus padres escogieron poner el nombre de Nicolás.

Nicolás el vencedor del pueblo.

Por lo cual tengo otra causa más para darle gracias a Dios por elegirme como abuelo de un niño muy bien hecho, que nació sano y grandote.

Por eso y por muchas bendiciones que he recibido, merezco descansar haciendo adobes. En la vida es necesario el trabajo como el descanso, voy a aprovechar esa enseñanza, el tiempo lo ocuparé para disfrutar a  mi familia, primero unos los que están cerca y luego los que están lejos.

Voy a estar en la etapa de contemplación por el nuevo miembro de mi familia, le pido a mi Dios larga vida para él y salud para mí.

Estaré de regreso el día 6 de enero, espero seguir contando con usted amable lector que sigue  mis líneas, o antes porque la costumbre de escribir todos los días de la semana AGENDA FRONTERIZA  se ha convertido en una adicción.

En una mirada al futuro cercano, percibo optimismo, un año de mucho trabajo, de cambios en los paradigmas del sistema político y social.

En mi caso, les confieso que hace 16 años recibí el impacto de un STROKE, accidente cerebro vascular comúnmente llamado EMBOLIA.

Desde ese tiempo, pasaron tres años de rehabilitación de la función de hablar, y después ya recuperado al 90% el miedo, el temor, la desconfianza en mí mismo,  no se me quitó, si antes fui muy despistado, desorientado, ahora lo era más.

Me siento Bendecido, tengo maneras de probarlo.

Fue en 2013 cuando cambie de domicilio. Al principio me sentí solo, atrás había dejado a la ciudad que me adoptó por 45 años, donde hice carrera, familia y amigos.

Fue difícil al principio, luego de acostumbrarme me invitaron a las reuniones mensuales de los compañeros de generación 64-67.

Aquel reencuentro con mis raíces significó para mí una nueva visión de la vida, compañeros y compañeras sensibles y sencillos.

Encontré con ellos y ellas una relación fraternal, desinteresada. Me dio muchísimo gusto haberme reencontrado con la generación.

En el 2016 uno de esos amigos me solicitó un consejo, y se lo di.

Por supuesto que no me hizo caso.

Al poco tiempo estuvo inmerso en una crisis propio de empresas.

Escucharlo me conmovió y me entusiasmó, me hizo regresar, recordar a los tiempos de las devaluaciones sexenales en que acudían a mi despacho contable personas desesperadas que no sabían que hacer frente a los nuevos tiempos que expresaban nubarrones a sus negocios.

Recuerdo que le dije, sin compromiso déjame ver si te puedo ayudar ya que hace 15 años que no atiendo un problema de crisis empresarial, cuando era mi especialidad en otros tiempos.

Entre a su empresa como amigo y me hizo pasar por los departamentos. Me sentí como un ingeniero civil o un arquitecto que al ver la pared saben si esta chueca.

Así yo, con simplemente observar supe lo que ameritaba atención urgente.

Al paso de 15 días tuve un diagnóstico administrativo y las probables soluciones.

Sin compromiso las resolví una por uno, renaciendo la confianza perdida por la autocensura, se me quito la desconfianza en mi mismo.

Hace dos años, seguí el discurso del candidato LOPEZ OBRADOR, le di mi voto, uno en más de 30 millones y esperé al arribo de la 4ª Transformación de la vida política y social de México.

Le creí.

Tanto creo que me hizo  volver a la academia y obtener la recertificación en mi carácter de Contador Público.

Mi especialidad es ayudar a resolver en la etapa de crisis empresarial.

Y este 2019 me hizo renacer, el tema central de mi colaboración de este día, he podido ayudar a resolver el problema en que estaban estancadas tres empresas y un organismo público.

Por eso  digo GRACIAS DIOS, porque cada día recibo bendiciones.

Ahora vuelvo a mis andadas,  asesoro empresas en materia administrativa y fiscal, gestiono créditos con bancos y con la banca de desarrollo, atiendo auditorias federales y el estado, del IMSS y del Infonavit.

Nuevamente GRACIAS DIOS por permitirme resucitar con mis ganas de vivir la vida.

Como el Ave Fénix.

Estoy a sus órdenes. Los honorarios son  por resultados.

En otros temas:

Quiero mucho a mi Alma Mater, la Universidad Autónoma de Tamaulipas. No solamente la quiero, sino que aún no termino de pagar la deuda que tengo con la UAT.

Es que a la UAT le debo todo lo que soy, 50 años he vivido y trabajado por las enseñanzas de la UAT. 45 AÑOS, desde 1974 en que me recibí como Contador Público hasta 2017 cuando me recertifiqué.

Por eso es que comento  de la UAT.

Y no es solamente de mi facultad. Toda la universidad la sigo como si estuviera en ella.

Por ello me interesa que usted sepa que la  Facultad de Enfermería Tampico implementó en su currícula la materia de Intervención en Casos de Desastres, con la finalidad de capacitar a los estudiantes en temas de reacción inmediata, cuando surja alguna situación de este tipo.

La nota del día la da el municipio de Reynosa. En reunión de Cabildo presidido por  Dra. MAKI ORTIZ, la  aprobaron todas las fuerzas políticas el programa de inversiones con recursos propios por 800 millones de pesos.

Le debo de comentar que ninguno de los 43 municipios, ninguno de los 10 municipios que se consideran grandes, tiene un presupuesto de inversión social de esta magnitud.

Y con recursos propios.

Mi correo: [email protected]

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