Por: Chano Rangel
Durante mucho tiempo, el gobierno mexicano, ha impulsado una política exterior de cero intervención en países extranjeros, un ejemplo de no meterse en lo que no le importa, esta política de la cancillería le había valido el respeto internacional a México; pero en esta administración y tratando de hacer copias chafas y baratas, las cosas se salen de control.
Dice el viejo refrán “en casa del herrero, cuchillo de palo” y lo que mucho exigimos, ahora lo hacemos por imposición y sin poner peros en las consecuencias. El gobierno de la república, puso el grito en el cielo, cuando el Presidente Trump, anunció su famoso muro en la frontera mexicana, y el escándalo mediático sobre todo se armó y se dejó sentir en todo el mundo.
El gobierno de la 4T se puso en contra y dijo que lucharía con todo la diplomacia, para que, este muro jamás llegará a su cristalización, pero creo que la vía diplomática fallo, y el muro no es de concreto, si no de 25 mil militares en la frontera sur y norte de nuestro país, un muro a base de la Guardia Nacional, La Marina, el Ejército y la Policía Federal Preventiva.
Durante muchos años, nuestro gobierno exigió un trato humano, justo y apegado a leyes internacionales, para que nuestros connacionales, que migrarán a los Estados Unidos, fueran tratados con decoro y respeto; durante décadas, muchos paisanos encontraron su sueño en ese país, ahora mandan remesas, que son las que sostienen la economía de muchos estados, como Guerrero y Michoacán, Zacatecas y muchos más; también nuestro gobierno rinde tributo a muchos que han triunfado y han hecho de su vida en la política una forma de vida en la unión americana.
Personas con Henry Cuellar, Tino Cuellar, Henry Cisneros, Antonio Villaraigosa, Arti Moreno y el astronauta Jesús Hernández, son reconocidos como hijos de migrantes mexicanos, en segunda o tercera generación, y esto sólo ocurrió, porque sus padres emigraron tratando de encontrar una mejor calidad de vida para su familia.
Pues eso que tanto exigimos, ahora el gobierno de la 4T, lo da con IVA incluido, deporta y trata a los migrantes como delincuentes, sólo porque a la Casa Blanca, le es incomodo el tema migratorio y ha hecho que México, haga el trabajo sucio en sus fronteras, anteponiendo nuestra política a la del vecino.
Así las cosas, ahora las deportaciones por miles se dan en México, ya se construyó un muro militar en ambas fronteras, en la sur y norte y los anuncios de la detención de grupos de migrantes, se dan como si fueran trofeos de caza, dejando la política y la diplomacia en el suelo, algo que tanto costó a nuestro país.
De Aquello y lo demás…
El que no tuvo vacaciones fue el alcalde de Rio Bravo, Carlos Ulivarri, que esta semana a puesto en marcha el programa de bacheo en las principales avenidas y calles de la ciudad. Además de ello, también impulsar programas de esparcimiento en estas vacaciones veraniegas, para que las familias riobravenses puedan disfrutar en familia.
Es preciso destacar, una de las obras más importantes de al ciudad, es la rehabilitación de la calle Guanajuato, sentida demanda de la población, porque es esta arteria, una vía por donde circulan diariamente miles de automovilistas.
Como lo expresa Don Jorge Alfredo Álvarez Franco, que reconoce la importancia de la obra y pidió al alcalde Ulivarri, que por ganas no quede, y que además la gratitud, estriba también en que será una obra a base de concreto hidráulico. Del mismo modo, los vecinos agradecieron las obras de este gobierno en el corto tiempo de esta administración.
Las palabras de Cirilo Toscano, fueron precisas, y aseguró que solicitaron al alcalde su intervención, para que la calle Guanajuato, que es el acceso a muchas colonias y fraccionamientos fuera atendida, y en menos de 1 año, esta petición fue atendida, por lo que Cirilo, reconoce la labor y el sentido ciudadano de esta administración municipal.
Siempre es preciso destacar, que la calle Guanajuato, se ha convertido en una de la arterias principales, para los riobravenses, y esta obra traerá consigo, el mejoramiento vial de la ciudad.
